Hola mamá

Ojalá estuvieras aquí. Ojalá pudiera contarte mi vida. Ojalá pudiera abrazarte. Ojalá siguieras aquí, siguieras cuidandome.

Te fuiste demasiado pronto. La vida no fue justa contigo. Ni conmigo. No fue justa con nosotros.

Ya no recuerdo la última vez que hablé contigo. La última vez que me escuchaste, que me miraste a los ojos y viste a tu hija. No lo recuerdo. El olvido es lo peor que hay en nuestra vida. La tuya, la mía, se llenaron de olvido. La historia se borra, no queda nada.

Ojalá algún día aprenda a ser fuerte de verdad, vivir sin ti, porque se que nunca volverá tu voz, porque se que no me cogerás nunca más de la mano.